domingo, 21 de febrero de 2016

Curvas por Bot

En una de mis salidas domingueras de hace ya algunos meses fui a parar casi por casualidad a la localidad de Bot, pequeño pueblo tarraconense que ya conocía de cuando llegué a él andando a través de la Via Verde que une Alcañiz con Tortosa. Para llegar al pueblo desde la N- 420 la carrtera es tranquila, con curvas, buen estado y paisajes agradables. Pero una vez que llegas al pueblo, almuerzas en la braseria Laia (no sin reserva, eso si) y sigues hasta tomar el cruce a la izquierda hacia Prat de Compte, no sabes lo que es realmente bueno. La vez anterior no llevaba la cámara. Pero ahora, acompañado de Víctor, me disponía a grabar tan hermosa carretera con el complemento de las vistas que ofrece.


Esta carretera está muy frecuentada por motos

Y también por ciclistas

Pasado Bot, cruce hacia Horta de San Joan

Más motos. V'ssssss

Víctor sigue mi estela

A partir de este cruce la carretera es un continuo serpenteo ascendente con curvas cerradas y unos barrancos laterales que dan vértigo. En casi ningún tramo se puede pasar de 50 km/h y hay que ir con mucho cuidado porque la calzada es muy estrecha, sin arcén y sin línea de separación de carriles. También es verdad que el tráfico es mínimo, y casi lo único que te encuentras en todo el trayecto son otras motos y algunos ciclistas atrevidos y muy en forma. Curva tras curva se llega a coronar el puerto y se tiene una vista del valle por donde discurre la T-333 que bien vale la pena haber subido hasta aquí.

A continuación toca el descenso. Curvas y más curvas cerradas que poco a poco, primero entre pinos y más abajo entre almendros en flor nos devuelven a la T-333, donde se agradecen las rectas donde exprimir un poco el puño de la moto después de  casi media hora de contención del gas y apreturas de embrague. Disfrutando de las vistas de los puertos del Parque Natural dels Ports a nuestra izquierda y los macizos de las Sierras de Pandols-Cavalls, que acabamos de atravesar a la derecha, por esta carrtera ancha, con arcén amplio y un piso magnífico, nos desviamos al cabo de pocos kilómetros hacia Horta de San Joan por la TV-3341.

Iniciamos el descenso

Largas rectas en la T-333









La carretera vuelve a ponerse interesante con curvas y estrecha calzada. Atravesamos Horta y unos kilómetros más adelante tomamos el desvío a la izquierda que nos lleva a Arens de LLedó, de vuelta otra vez a la comunidad aragonesa. De hecho la frontera la marca el río Algars que atravesamos ofreciéndonos una bonita vista. Y la triste realidad de que al cambiar de comunidad autónoma, el firme se vuelve irregular, lleno de baches y con bastante gravilla suelta. Desde Arens continuamos hasta toparnos con la A-1413 en mucho mejor estado que tomándola a la izquierda nos lleva hasta Cretas donde, sin bajarnos de las motos, damos un paseo por su enrevesado y atractivo casco urbano.

Cruce hacia Horta
Horta de San Joan
Moteros en Horta


Río Algars
Arens de Lledó

Carretera en mal estado TE-V-3341
Continuamos viaje hasta la A-231 que nos conducirá hasta Valderrobres, donde nos espera un maravilloso almuerzo en el restaurante El Salt. Y el descubrimiento por mi parte de que la cámara que llevaba fija en el casco la tenía enfocada demasiado abajo, con lo cual los impresionantes paisajes que me disponía a grabar no han salido nada más que de refilón. Eso si, el cuadro de instrumentos de la moto y el firme de la calzada acaparan todo el protagonismo.
Víctor
Calles de Cretas

Al principio me quedé un poco decepcionado, pero enseguida pensé que esa era la excusa perfecta para volver otra vez a disfrutar de estos parajes y estas carreteras. Víctor, cuento contigo para volver a hacer la grabación en condiciones.