Increíble la experiencia motera vivida el pasado fin de semana en tierras catalanas. El desafío se llama Rider1000 y consiste en recorrer 1000 km por tierras catalanas. O 500 km y hacer la mitad del recorrido. Esta año nos decidimos a probar la Rider500 a ver que tal nos iba la experiencia, y en el futuro intentar la Rider1000.
La experiencia ha sido más que gratificante. El reto consisitía en que la organización te daba 6 puntos (8 para la Rider1000) de paso por diversas localidades donde sellar un pasaporte. Los puntos de paso estaban desde el sur hasta el norte de Cataluña. Tú elegías el recorrido libremente. Nosotros hicimos 6 etapas, que son las que pongo a continuación (al final hicimos casi 700 km en una jornada de 13 horas):
1ª Etapa, para entrar en calor. Algunas curvas en la zona de Santa Coloma de Queralt y carreteras con buen firme y poco tráfico. Salimos lloviendo de Manresa pero poco a poco dejó de llover e hicimos gran parte del recorrido con la calzada mojada pero sin lluvia:
2ª Etapa, dejamos el sur y nos encaminamos hacia los Pirineos. A medida que subimos y dejamos la C-14 en Artesa de Segre, nos adentramos en las carreteras del montaña famosas del Pirineo. A partir de aquí es cuando la excursión se pone interesante. Algún tramo lo hacemos con una fina lluvia pero no molesta demasiado. Al llegar a Isona nos dimos ya de bruces con la montaña:
3ª Etapa, para mi la etapa más bonita del recorrido. Pasamos varios puertos por carreteras con curvas interminables donde la moto estaba más tiempo tumbada que derecha. Tuvimos que llevar cuidado porque la carretera estaba bastante mojada, aunque en este tramo apenas nos llovió:
4ª Etapa, aquí tuvimos más de lo mismo, carretera de montaña y curvas y más curvas, pero con lluvía y hasta granizo en algún tramo. Esto nos hizo ir con muchas precauciones e hizo que un tramo que podía haber sido precioso, no pudiéramos disfrutarlo como se merecía. Para no dejar los contrastes en la montaña, llegamos a Besalú con sol y temperatura agradable:
5ª Etapa, a partir de aquí tocaba volver otra vez a la civilización. Este tramo se hace prácticamente todo por autovía, aunque a nosotros se nos hizo interminable porque nos perdimos en Gerona con un tráfico de mil demonios, propio de un sábado por la tarde. Una vez encontrada la ruta correcta, tardamos también más de lo debido en encontrar el Coll de Revell, aunque al final apareció delante de nuestras motos:
Y 6ª Etapa, con el cansancio acumulado de todo el día, ya teníamos ganas de llegar a Manresa. Todo esta etapa fue por autovía y sin sobresaltos. Aparacábamos nuestras motos a las 21:30, es decir, 13 horas después de haber tomado la salida. Yo estaba exhausto, pero la experiencia había merecido la pena. A la organización del evento le doy un 10, todo fue sobre ruedas:
